La forma original no era la forma de estrella que conocemos hoy.
La forma recuerda a la de un donut.
En particular, hay dos versiones a las que más se les atribuye su nacimiento.
Se dice, de hecho, que los portugueses se vieron obligados a cambiar la apariencia de esa pasta porque en China, compartir conocimientos con extranjeros era considerado un delito capital y, como tal, prohibido y severamente castigado.
Su historia se pierde en el tiempo y, para encontrar un testimonio del primer churro, habría que remontarse al siglo I a.C.
Los churros serían, en cierto sentido, los descendientes directos aunque muchos coinciden en que la forma original no era la forma de estrella que conocemos hoy.
Las porras, que son los churros más grandes, con bicarbonato en la masa para conseguir una mayor crocantez y aireación en el interior.
Los buñuelos, cuya forma recuerda a la de un donut, y enriquecidos con calabaza o rellenos de chocolate, crema de café o natillas.
Una churrera o manga pastelera con boca de estrella.
Presionar directamente en el aceite caliente formando palitos de unos 8 cm de longitud.
Los cuernos recordarían en su forma a esta masa frita.
Existe una raza de oveja, la “Navajo Churro”, descendiente de la oveja “Churra”, típica de la península ibérica.
Los churros pueden ser los originales cubiertos con azúcar o con chocolate fundido, nata o caramelo, también en versión salada y no es raro encontrarlos con crema de ajo o de bacalao.